Al llegar a nuestro alojamiento vacacional, a todos nos gusta encontrar un espacio relajado, cómodo, que nos inunde de paz y tranquilidad, absueltos de la rutina y el ruido de la ciudad y del trabajo.
Dentro de la era de las experiencias, en la que nos encontramos hoy día, nos gusta que nos sorprendan y, por tanto, las primeras impresiones se convierten en un punto vital. Y, en el tema del hogar, no es menos. Por ello, es muy importante cuidar cada detalle de la casa, mostrar su esencia, ya que como dice el refrán “la cara es el reflejo del alma”. Con el fin de llegar a crear dicha experiencia entre los inquilinos, en las siguientes líneas, os traemos varios consejos para una buena experiencia del usuario. ¡Toma nota!
1.Completa tu vivienda. Esta es del más top para alquilar una vivienda y nos lo confirma Decolook, especialista en decoración. El factor sustancial a la hora de elegir la vivienda vacacional es que esté completa en todo. Cuanto más ayudemos en la acomodación y relajación del cliente, cuantos menos objetos y/o productos necesite, más en casa se sentirá.
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2.Personaliza. No sigas una misma línea de decoración, así el espacio tendrá un “toque personal” y generará una experiencia única en el usuario.
3.El sofá como pieza clave. ¿A quién no le ocurre que lo primero que haces cuando vas a una casa es probar el sofá? Es una pieza clave a la hora de sentirte como en casa. Además, no hace falta que compres el más caro o el más bonito, sino el más cómodo y de líneas sobrias. Así de simple y sencillo.
4.Complementa tu hogar. Arriesga con los complementos del hogar, como, por ejemplo, bandejas estampadas para llamar la atención en la cocina o encimera. ¡Es ideal! También, se suele añadir revisteros en el salón, ofreciendo así un estilo “vintage” a la casa, que tan ahora está de moda.
5.Cuida el baño. Dentro del ranking de los que más miedo dan, se encuentra la decoración del baño. Trata de buscar la diferencia a través de pequeños detalles, como muebles portátiles que pueden aportar un toque único o con plantas de interior, como helechos o hiedras, las cuales pueden servir para tapar ciertos desperfectos y, además, aportan calma.
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6.Llénala de luz. Uno de los mayores defectos de una vivienda y de lo más importante para el humano, la luz. Hay que apostar por la iluminación natural, pero no siempre es suficiente en la casa. Por ello, si no tenemos bastante luz natural, la artificial puede ayudarnos. Utiliza bombillas de bajo consumo y diferentes focos de luz, como las lámparas de pie, para hacer del hogar una estancia agradable.
7.Recicla. Todos podemos ser unos manitas, porque reciclar significa no contribuir al abuso del consumismo social. Crea tu propia decoración con artículos reciclados (claro está si lo sabes hacer con buen gusto) y ofrece a tus clientes un valor añadido. Coge un mueble, líjalo y barniza. Simple, asequible y personal.
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Como vemos, con unos pequeños “toques”, nuestra vivienda puede convertirse en un espacio único e irrepetible para el usuario. Porque la casa es el reflejo de nuestra personalidad y, sobre todo, es el lugar perfecto para que el inquilino se encuentre con los sentimientos esperados. Por esta razón, ofrecer una experiencia personal es esencial, ya que la vivienda es uno de los factores principales que influyen a la hora de decidir dónde hospedarse en las vacaciones.
Manten una c omunicacion fluida con el inquilino en el proceso de reserva, en el tiempo que se aloje en tu casa de vacaciones y en el proceso de devolucion de fianza («antes», «durante» y «despues»). Esto te servira para evitar posibles desencuentros que desemboquen en opiniones negativas